El sábado 7 de mayo Gatillazo presentó en la Jimmy Jazz de Gasteiz el
que es desde hace un mes su 6º retoño. Lejos queda el que fuera su
primer disco, bautizado con el mismo nombre de la banda allá por 2005,
dos años después de que La Polla rompiera el corazón de todos los pankys
(de postal)tanto ibéricos como los del otro lado del charco
disolviéndose.
Como convertirse en nada salió a la calle el 8 de abril y desde entonces el grupo está presentándolo en diferentes salas del estado. 14 nuevos alegatos rabiosos componen este disco. La esencia sigue siendo la misma: criticar todo lo criticable con chulería y sobretodo, mucha materia gris debajo de una cresta que aunque a veces el cantante no luzca siempre está presente.
Muchos de los temas nuevos pudimos escucharlos en directo: El Poder del Metal, Nada que Ver o Como Convertirse en nada. También sonaron Esclavos del Siglo XXI, Hemos venido a divertirnos o Un minuto en Libertad, incluidas en el anterior disco. No faltaron clásicos como SSegurataSS BlindaoSS (coreada por toda la sala como si de un partido de fútbol se tratase), Pijos Power, Vendido, Tortura, Gora Mari o Fascículos.
Entre
tema y tema se colaron, para alegría de los viejos y viejas punkrockers,
algunos himnos de juventud como Txus (he visto gente en verbenas de
pueblo vivirla como si estuvieran en el pogo de un cocierto de La Polla
Records), Johnny, Lucky man y Odio a los partidos, canción con la que el
grupo cierra los conciertos.
Que el tiempo pasa para
todos es incuestionable. Que el señor Evaristo Páramos es uno de los
mejores letristas de tierras cercanas y lejanas, también. Aunque ya no
brinque o haga piruetas ska como antaño, su ingeniosa mala baba sigue
dando justo donde es necesario: las conciencias.
Antes, cuando
no había Internet ni el acceso a la información era tan instantáneo, los
y las jóvenes teníamos que ingeniárnosla para ampliar nuestros campos
del saber. Para mí una cinta de La Polla Records fue más efectiva que
todos los tomos de la enciclopedia Larousse. Esa cinta, 18 años después,
sigue representando con sus letras todos los cánceres que cronifican
esta sociedad.
Puede que en el concierto del sábado no estuviera
sembrado. Musicalmente tampoco sonaron como acostumbran. Pero Gatillazo
siguen siendo uno de esos grupos que van a enseñarte más que todos los
profesores y profesoras del mundo y del ciber-espacio.
Por Reina Ginolanda para Arpha Press.
Fotografías: Iñaki Marabao.
Por Reina Ginolanda para Arpha Press.
Fotografías: Iñaki Marabao.
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